Animales invertebrados, características, clasificación y ejemplos
© Paradais Sphynx; animales invertebrados
El complejo mundo de los animales invertebrados engloba a una gran multitud de seres vivientes de nuestro planeta. Los zoólogos sostienen que el nombre obedece a razones de organización práctica, agrupando aquellos organismos carentes de vértebras, aunque la fauna invertebrada es inmensa y muy heterogénea, por esa razón la terminología empleada es insuficiente desde el punto de vista taxonómico o clasificación científica.
El reino Animalia tradicionalmente se subdivide en dos grupos y hemos seleccionado algunos temas de animales invertebrados que consideramos más relevantes para el usuario. Los Poríferos del subreino Parazoa, y los Cnidarios, Platelmintos, Nematodos, Anélidos, Moluscos, Artrópodos y Equinodermos, comprendidos en el subreino Eumetazoa.
Los animales invertebrados metazoos, es decir, aquellos constituidos por varias células y con ciertas características especiales que iremos estudiando en el desarrollo de cada tema, carecen de esqueleto interno articulado y de notocorda, suelen ser organismos de dimensiones pequeñas, su número es muy amplio y muchos, como los insectos, pueden llegar a formar verdaderas plagas perjudiciales para el hombre. En función de sus hojas o capas embrionarias se clasifican en diblásticos y triblásticos.
Los animales diblásticos se originan a partir de dos hojas embrionarias, una más externa denominada ectodermo y otra interna que recibe el nombre de endodermo. Entre ambas existe una cavidad o tejido viscoso denominado mesénquima.
Los animales triblásticos, en su desarrollo embrionario, se originan a partir de tres capas u hojas embrionarias, la interna denominada endodermo, la externa que recibe el nombre de ectodermo y una intermedia, el mesodermo; por otro lado, además del mesénquima, existe otra cavidad secundaria llamada celoma.

Animales invertebrados diblásticos

Entre los metazoos diblásticos se encuentra el grupo de los Poríferos y el antiguo filo de los Celentéreos, actualmente estos últimos forman dos filos independientes y comprenden a los Cnidarios y los Ctenóforos. Son animales de organización muy sencilla.
Las esponjas son animales invertebrados acuáticos que se las asocia en el grupo de los Poríferos y se caracterizan en tener forma de saco, con multitud de poros que rodean todo su cuerpo, no poseen boca por lo que se alimentan por filtración a través de los poros, disponen de cédulas flageladas denominadas coanocitos que producen corrientes para facilitar la entrada del agua, rica en oxígeno y nutrientes. Presentan simetría radial, es decir, su cuerpo puede dividirse en mitades simétricas en diversos planos de simetría. Al carecer totalmente de órganos se les incluye en el tradicional subreino Parazoa.
El filo Cnidarios son animales metazoos diblásticos también de simetría radial. Todos son acuáticos, mayoritariamente habitan en áreas marinas, aunque también existen algunas especies de agua dulce. A diferencia de los poríferos, los cnidarios presentan cédulas nerviosas, sistema digestivo o cavidad gastrovascular y elementos musculares como los tentáculos. Carecen de aparato respiratorio y excretor. Son incluidos en el grupo de los Eumetazoos. Como ejemplo del grupo destacan los pólipos y las medusas.

Animales invertebrados triblásticos

Dentro de los triblásticos existen dos grupos relacionados con el modo de formación de la boca y ano: los deuteróstomos, en los que la boca es de nueva formación y el ano surge del blastoporo enbrionario; y los protóstomos, que boca y ano se originan de restos del blastoporo.

Invertebrados protóstomos

Veamos los grupos de animales invertebrados protostomados de simetría bilateral: acelomados como los Platelmintos; pseudocelomados, los nematodos y el resto celomados, es decir, con cavidad general interna, como es el caso de los anélidos, moluscos y artrópodos.

Platelmintos

Son gusanos planos que carecen de sistema circulatorio y respiratorio, por lo que el intercambio de gases lo realizan a través de la piel, tampoco disponen de órganos de locomoción, en definitiva, son organismos muy sencillos. Algunos son parásitos e incluso parasitan a los seres humanos, otras de sus características es que son animales acelomados y hermafroditas. La tenia es un platelminto muy conocido.

Nematodos

Animales invertebrados con un cuerpo alargado y en forma de cilindro, habitan en ambientes acuáticos y terrestres, algunos son parásitos. Se caracterizan por ser pseudocelomados y carecer de órganos respiratorios. Un ejemplo son las lombrices intestinales.

Anélidos

Al igual que los anteriores tienen un cuerpo también cilíndrico pero segmentado o dividido en anillos, por ejemplo la lombriz de tierra. Existen especies de vida libre, otras en cambio son parásitos, son de costumbres terrestres, aunque también existen anélidos acuáticos que respiran por branquias.

Moluscos

Engloba a multitud de especies que adoptan formas muy heterogéneas como los caracoles, almejas, pulpo, etc. Pueden ser acuáticos o llevar una vida terrestre. El cuerpo se divide en tres partes: cabeza, pie y masa visceral. Algunas especies presentan una estructura dura, la concha, bien de una sola pieza como el caracol, bien de dos piezas como el mejillón; aunque también existen especies que carecen de concha.

Artrópodos

Es sin duda el grupo con mayor especies que comprende el reino Animalia. El cuerpo de estos animales invertebrados está divido en tres regiones: cabeza, abdomen y tórax, aunque también existe un grupo que se caracteriza por la presencia del cuerpo dividido en dos partes. Presentan apéndices articulados que pueden ser muy variados como alas, antenas, patas… Además poseen exoesqueleto a modo de protección frente a sus depredadores.

Metazoos deuteróstomos

Equinodermos

Animales invertebrados marinos celomados, algunos pentaradiados, aunque en la fase larvaria son de simetría bilateral. Viven en el fondo marino, pueden ser sésiles o de movimiento lento, carecen de cabeza y órgano sensoriales, aunque disponen de esqueleto interno calcáreo. Como ejemplos del grupo Equinodermos destacan las estrellas de mar, erizos de mar y los holoturoideos o pepinos, estos últimos de simetría bilateral secundaria dada las morfología característica que adopta su cuerpo.

Resumen taxonómico y ejemplos de invertebrados

Destacamos los filos más representativos de animales invertebrados:
Reino: Animalia, animales.
Filo Porifera: poríferos, esponjas
Filo Arthropoda: artrópodos, arañas, insectos.
Filo Mollusca: moluscos: mejillón, pulpos, caracoles.
Filo Cnidaria: cinidarios o celenterados, medusas, corales.
Filo Echinodermata: equinodermos, estrellas de mar, pepinos de mar.
Filo Platyhelminthes: platelmintos, gusanos planos, planaria, tenia .
Filo Nematoda: nematodos, gusanos cilíndricos.
Filo Annelida: anélidos, lombriz de tierra.

Resumen características animales invertebrados

  • Pertenecen al reino Animalia, en consecuencia son organismos pluricelulares y heterótrofos.
  • Carecen de columna vertebral y de esqueleto interno articulado, algunos tienen exoesqueleto, es decir, estructura ósea externa.
  • Los más primitivos carecen de todos o algunos órganos.
  • En función de su hábitat, la respiración puede ser traqueal, branquial, pulmonar o cutánea.
  • Existen individuos radiados (simetría radial) o bilaterados (simetría bilateral), un grupo más reducido destacan por presentar simetría pentaradial.
  • La mayoría son animales de tamaño pequeño.
  • Los animales invertebrados son los seres vivos más numerosos del planeta.
  • En algunos invertebrados la respiración es sexual, en otros asexual.
  • Pueden ser protóstomos o deuteróstomos en función de la formación de la boca y ano.
  • Existen invertebrados diblásticos y triblásticos según el número de hojas embrionarias.

Invertebrado

Este invertebrado clasificado entre los artrópodos, Drosophila melanogaster, ha sido objeto de muchas investigaciones científicas
Se denomina invertebrados (en latin invertebrata) a todos aquellos animales (reino Animalia) que no se encuadran dentro del subfilovertebrados del filo cordados (Chordata). El nombre alude a que, a diferencia de estos últimos, carecen de columna vertebral o notocorda, y de esqueleto interno articulado. El término es aplicable al 95% de todas las especies animales.1

Características[editar]

Lamarck es considerado el fundador de la «zoología de invertebrados». Lamarck se refirió a ellos como «animales sin vértebras» (en francés animaux sans vertèbres). En la clasificación de Carlos Linneo los animales no vertebrados se repartían en insectos y gusanos (refiriéndose respectivamente a los artrópodos y los anélidos).
En 1794, Lamarck subdividió a los que luego se denominó «invertebrados» en moluscos, insectos, gusanos, equinodermos y pólipos. En 1809, consideró ya diez clases: moluscos, cirrípedosanélidoscangrejosarañasinsectosgusanosequinodermos, pólipos e infusorios. Entre 1815 y 1822 Lamarck publicó, en siete volúmenes, la «Historia natural de los animales invertebrados» (Histoire naturelle des animaux sans vertèbres), con descripciones de las especies entonces conocidas y que fue obra de referencia durante mucho tiempo. Aunque muchos de los nombres anteriores siguen utilizándose, sus límites han de hacer
  • Suelen ser animales de pequeño tamaño
  • Carecen de esqueleto interno óseo o cartilaginoso o tienen pero es un esqueleto externo que se denomina exoesqueleto.
  • Muchos tienen conchas, caparazones o cubiertas de alguna sustancia dura.
  • No poseen esqueleto articulado.
Probablemente es el grupo que, con los microorganismos, ha sido el peor inventariado, porque los invertebrados son a menudo pequeños y viven discretamente, en los mares, los sedimentos, los suelos, etc. Su número, la complejidad de su descripción y la subestimación de su potencial económico, científico y alimentario contribuyó mucho tiempo desviando la investigación científica, y hubo que esperar a finales del siglo XVIII para que los científicos europeos repitan el trabajo allí dónde Aristote y Pline lo(la) habían dejado.2
En nuestros días, la investigación sobre los invertebrados permitió descubrir varias centenas de especies de gran potencia científico, industrial, económico o hasta alimentario, y la medicina moderna debe muchísimo a animales inesperados como el cangrejo de herradura, las medusas, el plancton.2 Los insectos, más fáciles capturar, identificar y conservar permanecen el mejor conocido grupo de invertebrados.
Tratándose del número de especies, la parte más importante de la biodiversidad conocida está constituida por organismos invertebrados. Sobre 1,7 a 1,8 millón de especies censadas en 2005 (según los criterios retenidos para su clasificación), encontramos cerca de 990 000 animales invertebrados.
Los invertebrados no forman un grupo monofilético : esta noción ha estado abandonada por las clasificaciones recientes (clasificaciones phylogénéticas). El término invertebrado queda sin embargo utilizado para designar un conjunto de seres vivos que comparten la característica por defecto de no poseer columna vertebral.

Uso[editar]

En la práctica profesional de la zoología, y en su enseñanza, la distinción entre vertebrados e invertebrados sigue ocupando un lugar, siendo comunes los departamentos universitarios, revistas científicas o manuales de zoología dedicados a los invertebrados, como el libro de Brusca y Brusca;3 y el de Hickmann, aunque esto debe interpretarse como efecto de una tradición, y no como el reconocimiento de validez o utilidad científica al concepto. En el tratamiento académico de la diversidad de los invertebrados se ha seguido utilizando extensamente la distinción de dos categorías: los artrópodos y los no artrópodos. Pero el problema que presentan estos últimos es análogo al indicado más arriba para el concepto de “invertebrados”.

Algunos filos y ejemplos[editar]

Macroinvertebrados[editar]

En el lenguaje de la ecología acuática, el término macroinvertebrado se utiliza tradicionalmente para referirse a los invertebrados de agua dulce, incluyendo los insectos (sobre todo larvas y ninfas), crustáceos, anélidos, moluscos (caracoles acuáticos y bivalvos) y planarias (platelmintos) que habitan en cauces de ríos, charcas, lagos, etc. Históricamente, su abundancia y diversidad se han utilizado como indicadores (bioindicadores) de la salud del ecosistema y de la biodiversidad local. Son un componente imprescindible en la cadena alimenticia y la trasformación de la materia orgánica.